Port de Confrides

El Port de Confrides, ascendiendo desde la localidad de Benilloba en la provincia de Alicante, ofrece una experiencia excepcionalmente pintoresca para los ciclistas, rodeada de colinas verdes y azules. El puerto se extiende a lo largo de casi 11 kilómetros con pendientes moderadas, convirtiéndolo en un desafío accesible para ciclistas aficionados, mientras que aún ofrece suficiente extensión y terreno como para suponer un reto para aquellos que buscan mejorar su resistencia. El perfil de la ruta se caracteriza principalmente por tramos rectilíneos y algunas rampas exigentes pero breves, alcanzando ocasionalmente inclinaciones de hasta el 12%.

Con un asfalto en buen estado, el puerto está bien preparado para el cicloturismo. Aunque no es una subida de curvas pronunciadas, las vistas a la derecha hacia la Sierra de Aitana son impresionantes, ofreciendo vistas amplias y despejadas de la campiña alicantina. Las condiciones climáticas, especialmente en verano, pueden sumar un nivel de dificultad adicional debido al calor intenso, por lo que se recomienda realizar la ascensión en las horas tempranas para disfrutar de temperaturas más cómodas.

Durante la subida, se cruzan pequeñas localidades como Benasau, aportando momentos de relajación e intercambios culturales en sus pintorescas calles. El port es reconocible por su tranquila y abierta traición, en la que los ciclistas pueden disfrutar de largos momentos de contemplación de los paisajes y del ejercicio constante en este ambiente idílico.

En una interesante entrevista a uno de los ciclistas acompañantes, Juanjo Peña, que acompaña a Miguel Ángel Granero en la ascensión, nos comparten experiencias sobre sus inicios en el ciclismo, ascendiendo desde las rutas llanas de Valencia hasta los míticos puertos en los Pirineos. Juanjo destaca la importancia de disfrutar los puertos más difíciles y no obsesionarse con los tiempos de subida, permitiendo al ciclista saborear la experiencia completa y disfrutar del entorno natural que rodea a cada ascensión.

La cima del puerto ofrece un merecido descanso frente a las espectaculares vistas coronando el puerto, con rutas alternativas cercanas hacia localidades próximas como Tudons y Ares del Bosque para aquellos que estén interesados en prolongar su aventura en bicicleta. En conclusión, el Port de Confrides no solo es una ruta magnífica por su paisaje, sino también por su accesibilidad para ciclistas de todos los niveles, prometiendo una jornada inolvidable sobre dos ruedas en plena naturaleza.