Coll de la Bassa + Antenas

En el corazón de la provincia de Castellón, se encuentra una de esas subidas que, sin ser extremadamente dura, promete dejarnos recuerdos inolvidables: el Col de la Basa. Comenzamos nuestra aventura en la CV170, uniendo el valle de Val d'Alba con Azeneta, mientras rodamos por un asfalto impecable que nos ofrece un comienzo ideal para este desafío cicloturista.

El puerto, que técnicamente comienza un par de kilómetros después del punto de referencia que tomamos, nos invita a explorar un tramo adicional hacia las Antenas de Col de la Basa. Este reto final añade un extra de dificultad, con un desnivel del 8% a lo largo de 1,2 kilómetros, pero también la promesa de vistas espectaculares desde la cima.

La ascensión es amable para los iniciados en el cicloturismo. Aunque el tráfico puede ser moderado, especialmente dado que esta ruta es un acceso rápido desde Azeneta hacia la costa, el recorrido se mantiene cómodo y llevadero. La subida se extiende con pendiente suave hasta alcanzar esos 600 metros de altitud, ofreciendo un entorno mediterráneo con pinos y árboles frutales que acompaña nuestro pedaleo.

A medida que avanzamos, encontramos la parte más emocionante de la subida. Las curvas serpenteantes nos llevan a un terreno algo más exigente, y es en esta zona donde el puerto muestra una cara más pintoresca y encantadora. El tramo final hacia las antenas puede ser un reto, pero se subraya que los valientes que deseen conquistar este último esfuerzo serán recompensados con vistas hermosas.

En conclusión, el Col de la Basa no solo es un destino para quienes buscan mejorar su rendimiento ciclista, sino también para aquellos que desean disfrutar de la belleza y tranquilidad que ofrece Castellón. Este puerto, junto con las antenas, nos invita una y otra vez a regresar y contemplar desde las alturas el espectacular contraste entre montaña y mar. Se anima a los ciclistas a afrontar este reto con entusiasmo y a descubrir la magia del cicloturismo en esta región única.